La Universidad Católica de Colombia informa a toda su comunidad académica que, fiel a su compromiso con la misión institucional, la identidad católica y la preservación del patrimonio, inició el proceso de restauración de la capilla “La Sagrada Familia”, ubicada en la sede El Claustro, en el barrio Palermo de Bogotá, tras los daños sufridos por el incendio ocurrido el 15 de octubre de 2024.
Este espacio, de valor importante para la Universidad, no solo representa un símbolo de espiritualidad, fe y encuentro con Dios, sino que constituye también un hito histórico y arquitectónico para Bogotá. Declarada Bien de Interés Cultural en la categoría de Conservación Integral, la capilla forma parte del legado arquitectónico del barrio Palermo.
“La capilla es el corazón que late y el alimento constante de la vida universitaria”.
— Papa Benedicto XVI
Fundada por la comunidad de Hermanas Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, quienes cedieron este predio a la Universidad, la capilla ha sido desde entonces un lugar de recogimiento, celebración litúrgica y formación espiritual. Su arquitectura, de un gótico austero en piedra desnuda se refuerza por el mural que preside el gran arco sobre el altar.
Este mural, una obra del maestro Leonel Vallejo realizada en 1987, representa los misterios del Rosario en un conjunto de más de 80 imágenes distribuidas en 92 metros cuadrados. Según expertos, esta es la única representación mural dedicada exclusivamente a los misterios del Rosario conocida en Bogotá.
La restauración de la capilla no solo responde a la necesidad de recuperar un espacio físico, sino a la decisión institucional de preservar nuestra identidad católica.
“Siendo Cristo el fundamento de la Universidad Católica de Colombia, es él quien revela con su rostro el rostro de la humanidad y la ordena a la verdad que genera libertad.”
— Declaración de Principios de la Universidad
La capilla “La Sagrada Familia” continuará siendo un lugar abierto para todos, donde estudiantes, docentes, administrativos, egresados y vecinos del sector encontrarán una casa común de encuentro con Dios, y un espacio para la reflexión.