En la formación de los futuros psicólogos, la teoría es solo una parte del camino. El verdadero aprendizaje ocurre cuando se cruzan los conocimientos académicos con la experiencia directa con los pacientes. Contar con una Unidad de Servicios Psicológicos propia representa una fortaleza estratégica del programa de Psicología de la Universidad Católica de Colombia. Esta unidad está integrada directamente al proceso formativo, permite una articulación real entre la teoría y la práctica, lo que se traduce en una experiencia educativa más completa, coherente y de alto impacto.
Gracias a este espacio, los estudiantes realizan sus prácticas en un entorno institucional confiable, con acompañamiento académico continuo y bajo un modelo de delegación progresiva de responsabilidades en docencia – servicio, un entorno controlado que asegura la calidad del aprendizaje. Esto facilita el desarrollo de competencias profesionales, específicamente habilidades clínicas y sentido ético, esenciales para el ejercicio responsable de la Psicología.
Un entorno real que articula el aprendizaje teórico con la práctica
En la Universidad Católica de Colombia, los estudiantes del pregrado en Psicología tienen la posibilidad de realizar su práctica clínica en la Unidad de Servicios Psicológicos (USP), la cual está diseñada y equipada para responder a los estándares del sector salud.
Esta fue creada con el propósito de brindar atención integral en salud mental a comunidades vulnerables y, al mismo tiempo, fortalecer la formación práctica de los estudiantes de pregrado y posgrado en Psicología.
Este espacio ha prestado servicios de forma ininterrumpida durante aproximadamente 49 años, ofreciendo acompañamiento psicológico a niños, adolescentes y adultos con diversas problemáticas, provenientes de las diferentes localidades de Bogotá y de municipios del departamento de Cundinamarca.
Atención a problemáticas frecuentes en diferentes etapas de la vida
A lo largo de su trayectoria, la Unidad ha identificado las principales necesidades y problemáticas en las distintas poblaciones atendidas:
En población infantil:
- Dificultades en los procesos de aprendizaje
- Déficit en el control instruccional
- Problemas asociados a pautas de crianza inadecuadas
- Trastornos del comportamiento
En adolescentes:
- Bajo rendimiento académico
- Problemas de agresividad o conductas disruptivas
- Necesidad de orientación vocacional y profesional
- Déficit en habilidades sociales y de comunicación
En población adulta:
- Trastornos de ansiedad
- Síntomas depresivos
- Conflictos de pareja y problemas familiares
- Situaciones de violencia intrafamiliar
Este abordaje integral no solo beneficia a la comunidad que accede a los servicios, sino que también se convierte en un escenario real y valioso de aprendizaje para los estudiantes de la Universidad, quienes fortalecen sus competencias clínicas bajo la supervisión de profesionales expertos.
Monitoreo continuo y modelo de acompañamiento progresivo
Uno de los aspectos clave de esta práctica es que se da cumplimiento a la “delegación progresiva de responsabilidades “, dado que se realiza un acompañamiento estructurado, semana a semana, en el que el estudiante primero observa, luego participa y finalmente asume el rol principal en las sesiones clínicas.
Este modelo permite:
- Desarrollar habilidades de forma gradual, acorde con su avance académico y nivel de competencia.
- Superar las inseguridades iniciales propias del comienzo de la práctica clínica.
- Recibir retroalimentación constante y constructiva por parte del equipo docente experto en la atención clínica
- Aplicar los conocimientos adquiridos en la evaluación e intervención de pacientes, fundamentados en la evidencia científica
Cuando los estudiantes de Psicología comienzan sus prácticas, ya tienen los conocimientos teóricos, pero es normal que se sientan inseguros al aplicarlos en situaciones reales. Por eso, con un acompañamiento gradual y supervisado, van asumiendo responsabilidades paso a paso, lo que les ayuda a ganar confianza y madurar como profesionales preparados para enfrentar los retos del mundo real.
Formación ajustada a los lineamientos del sector salud
Desde hace algunos años, la normativa en Colombia establece que la práctica clínica es obligatoria en la formación de psicólogos. Por eso, el contar con un escenario propio permite a la Universidad Católica de Colombia cumplir con todos los requisitos de habilitación, calidad y bioseguridad exigidos por los entes reguladores en salud y educación.
La Unidad de Servicios Psicológicos opera bajo protocolos estrictos de seguridad del paciente, manejo ético de la información y atención basada en evidencia. Todo esto garantiza que tanto el estudiante como el paciente estén protegidos y que el proceso formativo se realice en condiciones reales, pero controladas.
Red de apoyo profesional y aprendizaje colaborativo
Además del acompañamiento docente, los estudiantes cuentan con una red de monitores clínicos que trabajan de manera articulada de lunes a sábado. Esta red permite un seguimiento individualizado, con posibilidad de contar con profesionales que ofrecen sus servicios en psiquiatría, terapia ocupacional y del lenguaje, fonoaudiología y en el campo jurídico, para así recibir apoyo frente a los desafíos que surgen en la atención directa.
Ventajas laborales desde el pregrado
La experiencia clínica que los estudiantes obtienen en la USP no solo cumple un requisito formativo, sino que se convierte en un valor agregado en su hoja de vida. Las prácticas están certificadas y son reconocidas como experiencia profesional por muchas empresas del sector.
“De hecho, en los procesos de selección, algunas organizaciones nos contactan para validar la experiencia de nuestros egresados, porque saben que fue una práctica con casos reales y bajo supervisión formal”, explica Becerra. Esto contribuye a un mejor posicionamiento de los egresados en el campo laboral y ofrece claridad sobre el campo de acción que desean ejercer.
Además, aquellos estudiantes que descubren su vocación en la psicología clínica pueden acceder a la Especialización en Psicología Clínica desde el pregrado a través del modelo coterminal, fortaleciendo aún más su perfil.
En resumen…
Además de ser un requisito normativo para los programas del área, contar con una unidad propia dentro de la universidad representa un verdadero diferencial: brinda autonomía académica, fortalece la identidad profesional y prepara a los futuros psicólogos con herramientas reales para enfrentar los desafíos del contexto social y clínico actual.
Es una oportunidad para formar psicólogos capaces, empáticos y preparados para enfrentar el mundo real desde una base sólida y ética. Es también una forma de garantizar que la formación profesional esté alineada con las necesidades del entorno, las exigencias del sistema de salud y las expectativas del paciente.
¿Estás buscando una carrera que te prepare para intervenir en la vida real desde el primer momento? Conoce cómo el pregrado en Psicología de la Universidad Católica de Colombia integra teoría, práctica y acompañamiento clínico en un solo lugar.